Un capítulo especial merecen los armarios. Parece que es sencillo total, las medidas y poco más. La realidad es otra. Antes de mirar responde a estas preguntas:
- ¿Para quíen es?
- ¿Dónde irá?
- ¿Qué uso le voy a dar?
La respuesta te ayudará a “aclarar” las ideas. Y ¿porqué esas preguntas?
La primera pregunta ¿Para quien es? Te ayudará a definir no sólo el estilo, no es lo mismo un armario para un niño que para un adulto. Para un adulto es posible que las necesidades estén bastante “cerradas”, en cambio para un niño hemos de tener en cuenta que las necesidades irán cambiando con el tiempo. Y no sólo me refiero a que la ropa será más grande y ocupará más espacio. Un niño puede que al crecer tenga alguna afición o practique algún deporte que ahora no pensamos. El armario ha de estar preparado para cualquier modificación.
La segunda pregunta ¿Donde irá? Te ayudará tanto con las medidas, como con el tipo de puertas, puede que un espacio sea más adecuado para un armario de puertas correderas o un armario de puertas abatibles, o incluso dependiendo de las medidas, puedes elegir un armario rincón o empotrado.
Y por último el uso. Los armarios por dentro se pueden planificar para que le saques el máximo rendimiento. No sólo en cuanto a almacenaje, también es bueno tener en cuenta el uso que le vas a dar al momento de elegir la calidad. Por ejemplo si vas a guardar cosas de peso tenlo en cuenta al escoger el grosor de los estantes interiores.
Si quieres saber más sobre armarios, hemos escrito en nuestra revista de la decoración un post sobre la importancia de un armario, te invitamos a leerlo.
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